El FMI califica de "insostenible" la economía palestina

(Fuente: El País de España, 2 de noviembre, 2006)

El bloqueo económico de la comunidad internacional a la Autoridad Nacional Palestina -mientras Israel retiene ilegalmente los impuestos que recauda en su nombre- causa estragos en la población civil y en el tesoro público. El Fondo Monetario Internacional (FMI) dio a conocer ayer un informe que refleja lo que sobre el terreno se aprecia a simple vista: el Gobierno de Hamás está en bancarrota y la situación de sus finanzas es "insostenible". Ha ingresado desde abril a septiembre sólo 392 millones de euros, frente a los 940 que recaudó en el mismo periodo de 2005, un desplome del 60%.

Israel, EE UU, la UE y los países árabes tienen un objetivo: que Hamás, vencedor en las elecciones legislativas de enero, dé su brazo a torcer y reconozca formalmente a Israel. No es previsible que lo logren, a tenor de las reiteradas proclamas de los dirigentes del partido. Más probable es que el presidente palestino, Mahmud Abbas, se decida por disolver el Ejecutivo, una medida que acarreará consecuencias imprevisibles, aunque pocos dudan que la violencia entre las milicias de los partidos hegemónicos, Fatah y Hamás, se adueñará, más aún, de las calles en Cisjordania y Gaza.

Sometido a unas restricciones casi completas al comercio palestino -absolutamente dependiente de la arbitrariedad de los Gobiernos de Tel Aviv- y a la retención ilegal por parte del Ejecutivo de Ehud Olmert de los 281 millones de euros que adeuda a la Administración palestina por los impuestos indirectos recaudados en su nombre, el Gobierno de Ismail Haniya se ve imposibilitado de cumplir sus obligaciones con los 160.000 funcionarios, de cuyos sueldos depende un tercio de los casi cuatro millones de palestinos que malviven en Cisjordania y Gaza. Los empleados públicos sólo han cobrado alrededor de la mitad de sus salarios, que en su gran mayoría se elevan a unos 350 euros (235.000 pesos chilenos) mensuales.