Amnistía Internacional: Israel ha cometido crímenes de lesa humanidad en El Líbano.
La organización Amnistía Internacional (AI) ha hecho un llamado para que se investiguen los crímenes cometidos por Israel durante la invasión al Líbano.
En una conferencia en Londres, Kate Gilmore. Responsable del grupo en Inglaterra, dijo que en un reciente reporte de AI se han encontrado muchas violaciones identificadas como crímenes de guerra, las que incluyen ataques a civiles indiscriminados y desproporcionados. Hay evidencias múltiples de destrucción infraestructural[1] hacia fuentes de poder y plantas de agua, así como al sistema de transportes y fuentes de alimentos, todo ello coordinado como una estrategia militar planificada.[2]
Por otra parte, el 7 de agosto, más de 50 civiles perdieron la vida en Shyah, un barrio de Beirut. Delegados de Amnistía Internacional en el país visitaron el área un día después del bombardeo israelí y encontraron una escena de devastación completa, donde todavía se estaban sacando cadáveres de mujeres y niños de debajo de los escombros. Las fuerzas israelíes no habían avisado con antelación a los habitantes de los inminentes bombardeos aéreos. Shyah estaba considerado más seguro que otros distritos y muchas personas que habían huido de sus hogares en otras partes del país habían buscado refugio allí.
Conforme crecían las áreas que eran objeto de los ataques del ejército israelí, el número de personas desplazadas aumentó: después de un mes de conflicto, alrededor de un millón de personas –una cuarta parte de la población total de Líbano– había huido. Desde la cesación del fuego, muchas personas están regresando a sus casas, pero decenas de miles ya no tienen una casa a la que volver.[3]
En una conferencia en Londres, Kate Gilmore. Responsable del grupo en Inglaterra, dijo que en un reciente reporte de AI se han encontrado muchas violaciones identificadas como crímenes de guerra, las que incluyen ataques a civiles indiscriminados y desproporcionados. Hay evidencias múltiples de destrucción infraestructural[1] hacia fuentes de poder y plantas de agua, así como al sistema de transportes y fuentes de alimentos, todo ello coordinado como una estrategia militar planificada.[2]
Por otra parte, el 7 de agosto, más de 50 civiles perdieron la vida en Shyah, un barrio de Beirut. Delegados de Amnistía Internacional en el país visitaron el área un día después del bombardeo israelí y encontraron una escena de devastación completa, donde todavía se estaban sacando cadáveres de mujeres y niños de debajo de los escombros. Las fuerzas israelíes no habían avisado con antelación a los habitantes de los inminentes bombardeos aéreos. Shyah estaba considerado más seguro que otros distritos y muchas personas que habían huido de sus hogares en otras partes del país habían buscado refugio allí.
Conforme crecían las áreas que eran objeto de los ataques del ejército israelí, el número de personas desplazadas aumentó: después de un mes de conflicto, alrededor de un millón de personas –una cuarta parte de la población total de Líbano– había huido. Desde la cesación del fuego, muchas personas están regresando a sus casas, pero decenas de miles ya no tienen una casa a la que volver.[3]
posted by Oficina de Información Chileno Palestina @ 11:35 AM
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